Según los informes, el Estado Islámico ha condenado a muerte 8 luchadores holandeses después de que se enfrentaron con los líderes iraquíes en Raqqa y trataron de desertar de las filas de los grupos terroristas. 

Varios otros 75 miembros del grupo yihadista holandés, algunos de origen marroquí, habían sido detenidos en medio de crecientes tensiones con ISIS agentes de inteligencia de Irak