No sólo es un antisemita obsesionado sino que también es mentiroso

Mi Enfoque #542, Febrero 5, 2015 por David Mandel, enfoque@netvision.net.il

Israel acaba de tener un triunfo diplomático, algo que rara vez sucede. William Schabas, el jefe del Comité de Investigación de la Guerra de julio 2014 entre Israel y Hamás, ha renunciado.

Hace unos años dijo que "Si el presidente de Sudán es enjuiciado por genocidio [después de la muerte de cientos de miles en Darfur] no entiendo porque no enjuician también a Netanyahu". En más de una ocasión, en el pasado, ha pedido que Netanyahu y Shimon Peres sean juzgados por criminales, y ha dicho que Israel realiza crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra y crímenes de agresión.

Estas opiniones no fueron un obstáculo para que fuese nombrado para  investigar la guerra de Israel y Hamás. Todo lo contrario. Fue nombrado por el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas no por ser un hombre de reputación intachable, íntegro, imparcial, objetivo, sin prejuicios, sino por ser un antisemita obsesionado contra Israel y sus dirigentes.

Las investigación encomendada por el Consejo fue para investigar los hechos ocurridos desde el 13 de junio del 2014, es decir deliberadamente ignoraron el asesinato de tres adolescentes israelíes a manos de Hamás el día anterior, 12 de junio del 2014, que fue la chispa que originó todos los acontecimientos siguientes. La resolución del Consejo deploró "las graves violaciones de los derechos humanos de la población civil palestina", pero no consideró necesario mencionar los miles de cohetes disparados por Hamás a poblaciones israelíes ni los túneles designados para masacrar a civiles.

Hace unos días se descubrió que no sólo era Schabas un antisemita declarado sino que en una ocasión había recibido un pago de la Organización de Liberación Palestina, y que había mentido al negar en su aplicación al puesto que había tenido relación financiera con una de las partes.

Hay límites aún para la hipocresía, especialmente cuando es evidente, y el Consejo inició una investigación al respecto. Schabas no tuvo más remedio que renunciar.

Israel pidió que todo lo que se hizo cuando Schabas estaba a cargo que sea anulado, pero el Consejo se ha negado a hacerlo