La UNRWA evacúa de Gaza a Israel, a funcionarios internacionales después de amenazas de muerte

La Agencia de las Naciones Unidas para Refugiados palestinos en Oriente Próximo (UNRWA) evacuó al menos a altos funcionarios internacionales de la Franja de Gaza debido a que se teme por su seguridad.

El personal recibió amenazas de muerte y agresiones luego del anuncio de los recortes y despidos planificados por parte de la organización tras la decisión de Estados Unidos de no continuar financiando a la agencia.

Los empleados fueron retirados temporariamente del enclave costero a través del cruce de Erez, a pesar del hecho de que el puesto de control estaba oficialmente cerrado para la fiesta judía de Sucot. El director y director adjunto de la UNRWA permanecen en Gaza, con probabilidades de ser evacuados en un futuro cercano.

La dependencia del Ministerio de Defensa de Israel que supervisa el cruce informó que un número no especificado de empleados extranjeros de la agencia conocida como UNRWA “fueron evacuados de la Franja de Gaza a Israel”.

Los empleados de UNRWA en la franja han llevado a cabo ataques, sentadas y otras protestas desde que la agencia anunció en julio que estaba recortando el empleo a más de 250 personas en Gaza y de la Franja.

Los trabajadores despedidos advierten que sus familias corren un serio riesgo en Gaza, donde el desempleo es de alrededor del 53 por ciento.

El déficit presupuestario de UNRWA a raíz de la decisión de Washington de cortar su financiación de 350 millones de dólares, significa que se han eliminado 113 puestos de trabajo y 584 puestos de personal cambiaron a puestos de tiempo parcial.

Los países donantes se han comprometido a otogar118 millones de dólares en ayuda, así como 46 millones de dólares de la Unión Europea. Estados Unidos decidió una serie de medidas punitivas contra los palestinos, tanto diplomáticamente como financieramente.

En las declaraciones de la UNRWA se solicitó a las autoridades en el enclave dirigido por el movimiento terrorista Hamas “que respondan a las repetidas peticiones para proporcionar una protección efectiva a sus empleados e instalaciones”, agregando que “la falta de seguridad efectiva impacta en los servicios humanitarios vitales de más de 1.3 millones de refugiados de Gaza”, aseguraron.

La agencia brinda asistencia a unos 5 millones de refugiados palestinos registrados y sus descendientes, y proporciona la escolarización de 526.000 niños en Cisjordania, la Franja de Gaza, Líbano, Siria y Jordania.

El “derecho de retorno” es uno de los temas clave de la disputa en el conflicto israelí-palestina. Los palestinos afirman que los 5 millones de personas que la ONU reconoce como refugiados tienen derecho a regresar a sus hogares en Israel propiamente dicho. Israel, por su parte, rechaza esta demanda asegurando que esta situación es un intento de los palestinos de destruir a Israel por el peso de las cifras.

La población de Israel es de casi 9 millones, de los cuales aproximadamente las tres cuartas partes son judíos. Una afluencia de millones de palestinos significaría que Israel ya no sería un estado de mayoría judía.

Israel acusa a la /UNRWA de ayudar a perpetuar la narrativa palestina de la ilegitimidad de Israel por, únicamente, de conceder el estatuto de refugiado a los descendientes de los refugiados, incluso cuando son nacidos en otros países y tienen la ciudadanía allí, condiciones que los demás refugiados en todo el mundo.

Sin embargo, el Establecimiento de Defensa Israelí teme que los esfuerzos de Washington para debilitar el UNRWA pueden reforzar al Hamás y poner en peligro la seguridad de Israel, dado que crearía un vacío en la prestación de servicios básicos en la Franja de Gaza, donde la mayoría de los residentes dependen de la organización. Esto recaería en la escasez de alimentos, medicinas, educación.

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