La ignorancia de Obama

Mi Enfoque #551, Abril 9, 2015 por David Mandel, enfoque@netvision.net.il

Barak Obama, presidente de los Estados Unidos, se graduó de la Escuela de Leyes de la Universidad de Harvard. Luego, fue profesor de Ley Constitucional en la Facultad de Leyes de la Universidad de Chicago. Es indudable que Obama es un hombre sumamente inteligente, pero no siempre una gran inteligencia va acompañada de un gran conocimiento de historia.

El 4 de junio del año 2009 Obama dio un discurso, titulado, "Un nuevo comienzo", en la Universidad Al-Azhar del Cairo. Allí demostró su ignorancia de la historia antigua del pueblo judío y de la historia contemporánea de Israel. Dijo: "la creación del Estado de Israel fue para compensar a los judíos por la tragedia del Holocausto," algo que no sólo es completamente falso sino que confirma el alegato árabe según el cual los europeos expiaron su crimen a costa de los árabes.

La frase de Obama ignora que Israel es la patria ancestral de los judíos, que tuvieron allí un Estado Independiente por casi mil años; que siempre hubo presencia judía en la tierra de Israel; que la Liga de las Naciones aprobó el 24 de julio de 1922 el Mandato Británico sobre Palestina para que esa provincia del difunto imperio otomano fuese el Hogar Nacional del Pueblo Judío; que la comisión Peel en 1937, dos años antes de que comience la Segunda Guerra Mundial, propuso un plan de partición similar al que las Naciones Unidas aprobaron diez años después, en noviembre de 1947; que durante años las milicias judías, (Haganá, Irgún y Leji) lucharon contra árabes y británicos; y que la independencia israelí se logró al costo de 6,000 muertos, 1% de la población judía de entonces.

La ignorancia de Obama no sólo cubre acontecimientos que ocurrieron hace sesenta u ochenta años, lo cual podría tener justificación ya que él aún no había nacido, sino que también abarca acontecimientos ocurridos hace sólo veinte años, cuando Obama se supone ya tenía uso de razón (nació en 1961, y, por lo tanto, tenía 33 años en 1994). Me refiero al acuerdo firmado el 12 de octubre de 1994 entre los Estados Unidos y Corea del Norte, durante la presidencia de Bill Clinton, por el cual los americanos otorgaron ayuda económica a cambio de que Corea del Norte cese su programa nuclear.

Si veinte años es un período demasiado largo para que Obama recuerde lo que ocurrió en 1994, limitémonos a doce años. El 18 de febrero del 2002 (Obama tenía 41 años de edad), el presidente George W. Bush anunció que los Estados Unidos nunca permitirán que Corea del Norte se arme de bombas atómicas. Tres años después, en junio del 2005, los coreanos anunciaron públicamente que tienen la bomba atómica.

Como dijo el estadista irlandés Edmund Burke, (1729-1797), "los que no conocen la historia están condenados a repetirla."