Israel en alerta terrorista máxima después de que dos policías murieran en el segundo ataque de ISIS
Dos agentes de la Policía de Fronteras, una mujer y un hombre, Shirel Abukarat, de Netanya, y Yezen Falah, de la aldea drusa de Kisra Sumei, ambos de 19 años, fueron asesinados a tiros en el centro de Hadera el domingo por la noche, 27 de marzo. Los agentes de policía que cenaban en un restaurante cercano mataron a los dos hombres armados en el acto. El Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad del ataque en un comunicado publicado en su cuenta de Telegram. Los hombres armados fueron captados por cámaras de vigilancia disparando rifles de asalto en una calle principal de la ciudad normalmente tranquila en el centro de Israel. Llegaron a Hadera fuertemente armados con un gran arsenal de pistolas, rifles automáticos, cuchillos, una caja de munición que incluía balas robadas de grado 5.56 de las FDI, así como guantes. Evidentemente estaban empeñados en un asalto a gran escala con muchas bajas antes de que se interrumpieran.
La policía llegó con refuerzos a la ciudad árabe israelí de Umm al-Fahm y arrestó a cinco presuntos confederados, tres de ellos residentes locales, un hermano y dos primos de uno de los pistoleros. Uno es sospechoso de ayudar en el ataque y cuatro pertenecerian a una célula clandestina de ISIS.
El primer ministro Naftali Bennett declaró el lunes temprano: "Un segundo ataque de partidarios del Estado Islámico en Israel exige que las fuerzas de seguridad se adapten rápidamente a una nueva amenaza, y lo han hecho", dijo. Esta fue una referencia al ataque terrorista mortal en la ciudad sureña de Beersheba hace seis días, en el que un partidario de ISIS asesinó a cuatro civiles en una ola de apuñalamiento de automóviles.
"Insto a los ciudadanos a seguir vigilantes", dijo el primer ministro. "Juntos, también podremos derrotar a este enemigo". Bennett elogió el heroísmo de los dos oficiales de la policía fronteriza que murieron en Hadera "mientras protegían a los civiles con sus cuerpos. No olvidaremos su heroísmo. Deseo una recuperación completa a las seis víctimas heridas y envío mis más profundas condolencias a las familias", dijo Bennett.
Ambos ataques en Beersheba y Hadera fueron perpetrados por ciudadanos árabes israelíes: el primero un residente de la ciudad beduina de Houra en el Negev, el segundo desde la ciudad árabe de Umm al-Fahm en el centro de Israel. El servicio de seguridad nacional Shin Bet se está investigando a sí mismo para averiguar cómo es que pudieron al identificar el peligro planteado por dos terroristas de Umm al-Fahm, al menos uno de los cuales era conocido por ellos.
El jefe de policía Kobi Shabtai ordenó una alerta máxima en todo el país, reforzó las patrullas en los centros de las ciudades y estableció barricadas y puestos de control en las carreteras principales. El ejército ha desplegado cuatro unidades adicionales en Judea y Samaria y está intensificando los ejercicios de entrenamiento.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y cuatro ministros de Relaciones Exteriores árabes, que llegaron el domingo por la tarde para unirse al canciller Yair Lapid para una conferencia en el Negev, tuitearon el domingo por la noche: "Condenamos el ataque terrorista de hoy en Hadera, Israel. Tales actos sin sentido de violencia y asesinato no tienen cabida en la sociedad. Estamos con nuestros socios israelíes y enviamos nuestras condolencias a sus familias.
La conferencia terminará más tarde el lunes con un comunicado conjunto.
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