miércoles, 30 de marzo de 2022

Israel se prepara para una nueva ronda de violencia en ciudades mixtas y en Gaza

La policía traza un mapa de posibles puntos críticos para los disturbios a medida que convergen el Ramadán musulmán, la Pascua judía y la Pascua cristiana; los oficiales lamentan la escasez de tropas; advirtiendo que también pueden ser necesarios durante el lanzamiento de cohetes desde Gaza
Liran Levi
Coches incendiados durante disturbios raciales en Lod en 2021

Las fuerzas de seguridad israelíes afirmaron que era solo cuestión de tiempo antes de que estallaran los disturbios entre ciudadanos árabes y judíos como lo habían hecho en mayo de 2021, provocados por violentos enfrentamientos durante el mes sagrado del Ramadán.

Los disturbios del año pasado, que se extendieron desde Jerusalén a ciudades mixtas judías y árabes, culminaron con una ronda de combates contra las facciones palestinas en Gaza.

Tras los recientes ataques terroristas en Be'er Sheva y Hadera, y el avance de las fiestas musulmanas, que coincidirán con la Pascua judía y la Pascua cristiana, la policía de Israel anticipaba una oleada de enfrentamientos violentos.

El comisionado de policía Kobi Shabtai sostuvo una serie de reuniones con altos mandos de la policía en preparación para lo que llaman "Operación Guardián de los Muros 2", que lleva el nombre de la guerra de mayo de 2021.

La policía dijo que esperan hasta 35 días de posible violencia, e incidentes 3 veces la magnitud de los ocurridos el año pasado, con decenas de puntos calientes en todo el país y posibles disparos de misiles desde Gaza.

Cúpula de hierro activada contra cohetes lanzados en Gaza en mayo de 2021 (Foto: Reuters)

El comisionado estimó que había una escasez de 4.500 policías y militares necesarios para mantener la paz y una necesidad urgente de llamar a 4.000 reservistas.

El comandante de una unidad policial de élite admitió que en el pasado, la fuerza necesitaba unas 72 horas para prepararse antes de que pudieran desplegarse como se necesitaba, para detener los disturbios en ciudades mixtas.

Comisionado de Policía Kobi Shabtai (Foto: Sharon Tzur)

Se esperaba que los disturbios estallaran sin previo aviso, e incluyeran el uso de armas de fuego contra las fuerzas de seguridad y los civiles. Muchas carreteras pueden estar bloqueadas y los automóviles civiles podrían convertirse en objetivos para los alborotadores y terroristas.

La policía también se preparaba para los enfrentamientos en Cisjordania, que pueden encender los disturbios entre los palestinos recluidos en prisiones de seguridad.

Es posible que la policía también tenga que atender las áreas que pueden ser objeto de ataques e incendios masivos con misiles y cohetes, que pueden ser provocados por dispositivos incendiarios enviados desde Gaza.

La fuerza se estaba preparando para un escenario en el que muchas de sus propias tropas serían llamadas al servicio militar, lo que agravaría sus dificultades de despliegue.

Un residente palestino reacciona durante las peleas con la policía israelí- mayo de 2021 (Foto: Reuters)

Los distritos policiales trazaron posibles escenarios y los presentaron al comisionado Shabtai. El distrito central esperaba violencia en las ciudades mixtas de Lod y Ramle con judíos y árabes residentes en confrontación y la participación de instigadores de derecha. Se esperaba que los alborotadores árabes vandalizaran propiedades de propiedad judía, incendiaran sinagogas y usaran armas de fuego.

El distrito de Jerusalén dijo que además de la tensión en curso en Sheikh Jarah y alrededor de la mezquita de Al Aqsa, los enfrentamientos en Cisjordania pueden extenderse a la ciudad interrumpiendo el tráfico en los puestos de control fronterizos. Jerusalén puede ser un centro para los extremistas religiosos en ambos lados del conflicto.

La policía fronteriza impide que miembros del grupo extremista judío Lehava marchen a la Puerta de Damasco en Jerusalén  (Foto: AP)

El comandante del distrito sur dijo que anticipaba que las carreteras serían bloqueadas por alborotadores en todo el Negev con residentes beduinos participando en manifestaciones y apuntando a símbolos del estado.

El distrito de Tel Aviv estaba mirando a Jaffa, el sector sur de Tel Aviv, donde se esperaba que tanto los extremistas judíos como los árabes optaran por la violencia.

En Cisjordania, a la policía le preocupaba que los disturbios palestinos incluyeran el uso de armas de fuego, a pesar de un toque de queda que probablemente se impondrá en toda la zona durante las vacaciones.

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